El coste del gas tiene repercusión en distintos ámbitos, uno de ellos es el de la generación de electricidad, ya que las centrales que utilizan gas en la producción de energía eléctrica han tenido un sobrecoste, debido a la fuerte subida que ha tenido el gas en los mercados mayoristas. El incremento del precio del gas ha provocado una subida en el coste de la electricidad.
Para hacer frente a esta situación, la Comisión Europea ha permitido a España y Portugal, mediante la denominada excepción ibérica, la creación de un tope al precio del gas que libera a las centrales productoras de su actual sobrecoste.
Para ello, el Real Decreto Ley 10/2022 estableció en junio de 2022 un precio máximo del gas (el tope del gas) a pagar por las centrales productoras de energía hasta el 31 de mayo de 2023. Este tope se fijó en 40 euros el megavatio durante los seis primeros meses, pero después irá subiendo progresivamente.
Pero ¿qué sucede con el resto del coste de la energía, la cantidad restante entre el tope del gas y la cantidad real que las centrales productoras pagan por él?
Para amortiguar la elevada subida del precio, el Real Decreto ha creado el denominado mecanismo de ajuste, un procedimiento por el que esta cantidad restante se repercute directamente en la factura eléctrica que paga el consumidor final.
El objetivo de este mecanismo de ajuste es ayudar económicamente a las centrales para que sigan asumiendo la compra del gas en el mercado mayorista de cara a la producción de electricidad y de esta forma el precio de la electricidad también se vea abaratado.
Cómo afecta a la factura
El mecanismo de ajuste se aplica al cien por cien de los consumidores, ya sean del mercado regulado o del mercado libre:
–Mercado regulado: Las personas consumidoras con tarifa regulada por el Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC) asumen el mecanismo de ajuste en su factura desde el 15 de junio de 2022 hasta el 31 de mayo de 2023. En estas facturas, este nuevo coste no aparece identificado, ya que está integrado en el concepto Coste de la Energía, que es el que sufrirá el incremento respecto a la factura habitual.
–Mercado libre: El Real Decreto establece que el mecanismo de ajuste se aplicará para el mercado libre en aquellos contratos que se renueven a partir del 26 de abril y hasta el 31 de mayo de 2023. Los contratos anteriores mantendrán el precio fijado pactado con la comercializadora, pero las revisiones anuales que se hagan a partir de esta fecha deberán incluir los nuevos costes variables, por lo que los consumidores deberán fijarse en el precio del kilovatio por hora para comparar ofertas. Normalmente los contratos son anuales, por lo que a lo largo de este año la mayoría de los contratos se verán renovados y la mayoría de los consumidores pasarán a pagar el mecanismo de ajuste.
