Se trata de una medida temporal que permitirá a las comunidades propietarios optar también a estas tarifas reducidas para el consumo de gas. Para ello, deberán cumplir los siguientes requisitos:
- La comunidad deberá estar al corriente del pago de todas sus obligaciones económicas.
- Deberán disponer de contadores individuales de calefacción, siempre que no estén excluidas de esta obligación por inviabilidad técnica. Las comunidades dispondrán hasta el 30 de septiembre de 2023 para poder instalar los contadores individuales. Además, deberán aplicar un coste unitario calculado en base a la tarifa aplicada para el agua caliente sanitaria y de calefacción a partir del momento en que dispongan de dichos contadores individuales.
- Deberán haber realizado en plazo la inspección de eficiencia energética con resultado positivo.
La solicitud de la nueva tarifa último recurso deberá ser realizada por el presidente de la comunidad de propietarios y deberá dirigirse a la comercializadora de último recurso (CUR) a la que pertenezca la comercializadora que actualmente lleva a cabo el suministro en la comunidad.
La Tarifa de último recurso para comunidades de vecinos se estructurará en dos tramos, en función del consumo realizado:
- El primer tramo, el más económico, se aplica sobre el volumen de consumo medio de la comunidad en los 5 últimos años.
- Si se supera este consumo medio, se aplicará, a ese tramo, el término variable incrementado en un 25%
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