El Hospital Gregorio Marañón supera en 2022 las cifras de donantes y de trasplantes hepáticos y renales

De las 35 donaciones realizadas el pasado año en el Hospital Gregorio Marañón, 23 se han producido en asistolia controlada y 12 en muerte encefálica. El programa de donación en asistolia controlada se viene realizando en el Marañón desde 2013. Se trata de pacientes ingresados en las unidades de Críticos del centro, que fallecen en parada cardiaca tras la adecuación del tratamiento de soporte vital, a diferencia de la muerte encefálica con persistencia de la actividad cardíaca, que era la forma habitual de donación hasta hace unos años, como apunta Braulio de la Calle, coordinador de trasplantes del Gregorio Marañón.

La disminución de la siniestralidad vial y el avance del tratamiento de los pacientes neurocríticos han hecho disminuir el número de donaciones con esta última modalidad, por lo cual, y siempre con el consentimiento y la autorización de la familia y siguiendo todos los protocolos del Comité de Ética Asistencial y de la ONT, se plantea la donación en asistolia controlada. “En un hospital de alta complejidad, como el Marañón, la donación en asistolia controlada requiere de una excelente labor de organización entre los profesionales de coordinación de trasplantes y los de las distintas unidades de Críticos”, añade Braulio de la Calle.

Estas cifras no serían posibles sin la solidaridad y el altruismo de los donantes y de sus familias, que generosamente han donado órganos y tejidos, pero también gracias a la pro actividad y el empuje de los equipos que forman parte de coordinación de trasplantes. Un total de 10 profesionales entre intensivistas, enfermeras y personal de administración, que coordinan esta labor junto a los profesionales que conforman las seis unidades de Críticos que alberga el Marañón.

Así mismo, el Dr. De la Calle destaca el inicio de la utilización de la ECMO, es decir la circulación extracorpórea, en la donación en asistolia controlada. Con este sistema se establece una circulación extracorpórea con oxigenación de la sangre inmediatamente después de la certificación del fallecimiento en parada cardíaca, para minimizar la isquemia de los órganos. Esto permite que la obtención de los órganos se haga con menos premura y, además, puede mejorar la función de los órganos trasplantados.

Cifras récord en trasplante de órganos

En cuanto a la actividad de trasplante de órganos, 2022 también ha sido un año de cifras máximas históricas, con un total de 154 trasplantes. Destacan las cifras record de trasplante renal con un total de 76 trasplantes y de trasplante hepático con un total de 53 trasplantes. 

“Este aumento de la actividad de trasplantes supone un 15% más en el caso de los trasplantes hepáticos y hasta un 36% de aumento en trasplantes renales respecto a 2021” apunta José Luis Escalante, jefe del Programa de Trasplantes del Marañón.

“Es importante resaltar, además, el carácter innovador de nuestros equipos de trasplantes”, señala el Dr. Escalante. En el caso del trasplante renal, casi el 50% (36 de 74) han sido órganos procedentes de donantes en asistolia, siendo el hospital de la Comunidad de Madrid que más trasplantes de estas características ha realizado. Igual ocurre con el trasplante hepático, con un 35% (19 de 54) de órganos trasplantados procedentes de donantes en asistolia.

Con 25 trasplantes cardiacos hechos, el Marañón ha sido uno de los tres hospitales que, a nivel nacional, más trasplantes ha realizado, destacando que 9 de ellos han sido infantiles, lo que le sitúa a la cabeza en este tipo de trasplantes. En cuanto a los programas de trasplantes de tejidos, en 2022 se han mantenido en los mismos niveles que en el año anterior, subrayando un incremento del 9% en el número de trasplantes de progenitores hematopoyéticos llevado a cabo.